Realismo puro y duro. En el vestuario del Almería son conscientes de que la situación no es la mejor y que la salvación se ha alejado. Ahora bien, los equipos que casi se ven descendidos suelen terminar las temporadas muy bien porque juegan sin presión. Hernán Bernardello no ha tirado la toalla, y todos están a una para sacar el barco a flote: “La gente nos apoya en todo momento estemos donde estemos. Estamos a siete de la salvación y con un calendario complicado. Todos pensamos en positivo. Si pensamos en negativo, te vuelves loco”.
Hay que ganar, como mínimo, cinco partidos, y casi todos los rivales son de la zona alta de la tabla. Hernán sólo piensa en el Valencia de Unai: “Estamos a siete puntos, pero tenemos que hacernos fuertes en casa y nuestros rivales también tienen partidos muy complicados. No podemos pensar más allá del Valencia, ni en cómo llegan, sino ganar. Trabajaremos como nunca”.
Hay que ganar, como mínimo, cinco partidos, y casi todos los rivales son de la zona alta de la tabla. Hernán sólo piensa en el Valencia de Unai: “Estamos a siete puntos, pero tenemos que hacernos fuertes en casa y nuestros rivales también tienen partidos muy complicados. No podemos pensar más allá del Valencia, ni en cómo llegan, sino ganar. Trabajaremos como nunca”.
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